Carlos Duarte cardiólogo y
pediatra, denunciò ante el plenario de la OEA, que en el transcurso de las protestas
en Nicaragua, la ministra de salud Sonia Castro, fue tajante y directa en una
orden que según ella se tenía que cumplir, “no pueden atender a ningún herido
que venga de las protestas contra el comandante Daniel”, “déjenlos que se
mueran porque es mejor que mueran, antes que sigan en contra de mi comandante"; por lo cual el cuerpo médico, no estuvo de acuerdo, por que no podían permitir más
muertes pudiendo evitarlas, pero los médicos que apoyan al gobierno si lo
hicieron, por lo que hubieron muchos universitarios que pudieron salvar sus
vidas si los hubieran ayudado en el momento en que llegaron a los hospitales
Duarte, quien actualmente se
encuentra exiliado en los Estados Unidos tuvo que pasar una semana escondido en
la montaña, para luego cruzar la frontera entre Honduras y Nicaragua ya que era
perseguido por la policía sandinista y los paramilitares de Ortega, con la
orden clara de “darle piso” término que utilizan los sandinistas, para
referirse a dar muerte a los que opinan diferente, por lo que su delito fuè,
atender a los universitarios heridos y estar en total desacuerdo en la brutal represión
que Ortega, ejercía sobre un pueblo indefenso y desarmado, que lo único que pide,
es una Nicaragua mejor, una sociedad libre, un país democratizado.
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