Rubén Barrera, es un conocido
delincuente de león cuya especialidad es la estafa
en su último golpe, se hizo
pasar como pastor de una iglesia evangélica, y solicitaba dinero para según el mejoras del templo
por lo que fue denunciado públicamente por sus víctimas, entre ellas una señora
que en un video que se hizo viral lo enfrento y le reclamo sus andanzas
delincuenciales, luego volvió a la paleta pública cuando en lo más crudo de la represión, oraba y según él, le daba la bendición a las hordas de paramilitares, con las recomendaciones
que se cuidaran y no dejaran a nadie vivo, después de pasar unas semanas en el
anonimato, ayer volvió a la escena pública, ofendiendo y amenazando a los
representantes de la alianza azul y blanco, entre ellos la señor Violeta Granera, a quién le gritò que era ladrona que todos ellos eran ladrones, por lo que la ciudadanía
se hace la siguiente pregunta: en el país de ortega, los ladrones son honestos
y los honestos ladrones?
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